LX – Ojos tristes

Ojos tristes, decía la canción y yo me acordé de ella. Incluso cuando reía sus ojos decían melancolía, y al poco tiempo de quererla deseé no haberlo hecho.

Tal vez conozcas a alguien cuyos ojos no son tristes, pero lo es su voz, su modo de caminar, sus gestos… Les abrimos el corazón porque confundimos su pena con la necesidad de afecto.

La tristeza te abraza, te arropa y te retiene junto a ella hasta que no puedes alejarte más de unos pocos pasos de su sombra sin sentirte perdido.

Volví a verla años después, caminaba junto a su pareja empujando un carrito de bebé. Me miró y me saludó con un gesto de la cabeza que decía —¿Ves? No soy como tú pensabas, soy feliz, tengo todo lo que necesito para serlo —

Sus ojos, sin embargo, me dijeron que la tristeza la esperaba en casa.

Sad eyes never lie

 

dilectia