LV – Tiempo despacio

Todo comenzó a principios del año 2027. En febrero apareció, en los medios de comunicación, un informe científico que indicaba que el tiempo transcurría cada vez más despacio.

Mediante complicados cálculos matemáticos, los estudiosos de los mecanismos que gobiernan la materia y la energía, los físicos teóricos, intentaban dar una explicación al suceso sin ser capaces. Al principio, la ralentización del tiempo era apenas perceptible, pero el fenómeno fue dejándose sentir sobre las personas, los animales y las plantas.

Pasaron 5 años y la vida en las ciudades era agradable, satisfactoria. La palabra estrés desapareció del vocabulario colectivo. Nadie llegaba tarde y disfrutábamos de nuestro tiempo libre.

Tras otros dos años en los que el tiempo avanzaba cada vez más despacio la felicidad se esfumó. La gente se aburría. Aumentaron las depresiones y los suicidios. 

Hoy, 24 de junio de 2035, el tiempo se ha parado, o al menos transcurre tan despacio que no tenemos percepción alguna de su paso. No envejezco. Exhausto escribo estas, mis últimas palabras que tal vez nunca lea nadie. Tal vez todo sea un engaño de mi cabeza. Tal vez estoy loco.

Me despido porque carezco de todo lo que me hacía sentirme humano. Digo adiós a este infierno en vida, este hoy infinito. La esencia del hombre es la esperanza del mañana, y yo la he perdido.

PD: parece que el proceso continúa y como algunos anunciaron, ahora el tiempo transcurre hacia atrás…  los científicos hablan de una paradoja imposible, y nadie sabe decirnos cómo afectará a nuestras vidas. He recuperado la esperanza, y aguardo pacientemente mi destino, soñando con dar de nuevo mi primer beso.

 

dilectia