Era viejo, era campesino y era castellano.
A los 73 años se olvidó de quien era y empezó a ser quien soñaba.
Una gaviota.
Tanto voló sobre los mares de trigo que sus alas se convirtieron en polvo.
Era viejo, era campesino y era castellano.
A los 73 años se olvidó de quien era y empezó a ser quien soñaba.
Una gaviota.
Tanto voló sobre los mares de trigo que sus alas se convirtieron en polvo.